La agricultura chilena enfrenta el desafío creciente de diversificar sus producciones, a fin de fortalecer y ampliar la presencia que ya ha conseguido en los mercados agrícolas del mundo. Esta exigencia afecta particularmente al segmento de los agricultores pequeños y medianos, que requieren, en el mediano plazo, reestructurar y definir sus rubros y sistemas de producción, de modo que puedan desarrollarse técnica y económicamente en un mercado abierto y competitivo.
La explotación del avestruz se presenta como una nueva alternativa para diversificar la agricultura en nuestro país. Además de ser un animal hermoso y majestuoso, el avestruz, con su tamaño y elegante rapidez, siempre ha inspirado un sentimiento de sobrecogimiento. La cría del avestruz se ha convertido en una industria de rápido crecimiento, que ha pasado a ser una fuente interesante de ingresos. Por tratarse de un rubro no tradicional, sobre el cual se poseen escasos antecedentes de manejo y de mercado, toda incursión en esta nueva línea productiva debe ser analizada cuidadosamente.
Durante los últimos años ha habido una gran demanda por reproductores de avestruces, los que han alcanzado precios extraordinarios e irreales. Sin embargo, se estima que la crianza de avestruces puede ser un negocio rentable en la medida que el productor se capacite, trabaje a conciencia en la explotación y sepa que, además de la excelencia en el manejo de los animales, es indispensable una promoción continua y permanente de los productos que de ellos se obtienen.
Como en todo nuevo rubro, si no se elabora una adecuada estrategia de marketing, es probable que el número de productores que se dediquen a la crianza no sea proporcional a la demanda de los productos. Por eso resulta indispensable la asociatividad de los productores del rubro en todo su ciclo, desde la producción del huevo hasta el faenamiento y comercialización de los productos.
Se reproducen prolíficamente hasta los 40 años, y producen anualmente cinco veces más volumen de carne y cuero que lo que produce el ganado vacuno. Además, ocupan poco espacio y tienen una mejor conversión alimenticia. Las avestruces presentan todas las características necesarias para ser altamente rentables para los inversionistas y agricultores con visión de futuro.
Los productos que se pueden obtener de esta ave son carne, piel, plumas, aceite, y huevos.
En cuanto a la carne, al considerar las demandas alimentarias del consumidor moderno nos encontramos con necesidades no satisfechas. Una dieta moderna consigna como premisa lo sano y lo equilibrado, por lo tanto cualquier producto que satisfaga este requerimiento será altamente valorado y aceptado por el mercado. Por eso la producción de carnes tiende hoy a diversificarse para satisfacer al consumidor, ofreciendo un producto nuevo en el mercado de las carnes, un producto con alto valor agregado por su buena calidad, presentación y bajos índices grasos, la carne de avestruz.
La carne de avestruz tiene buen sabor y es similar en textura y apariencia a la carne de ganado vacuno. Sumamente alta en hierro y proteínas, es considerablemente más baja en grasa, colesterol y calorías que la de vacuno.
Los polluelos recién nacidos miden cerca de 25 cm. de altura y pesan aproximadamente 1 kilo. En promedio, el polluelo crece 25 cm. mensuales durante los seis primeros meses. De los 10 a los 14 meses de edad están listos para el matadero, pesan normalmente alrededor de 110 kilos y rinden aproximadamente un 60% luego de faenados. El avestruz produce también 1 a 2 kilos de plumas usables. La extraordinaria proporción de conversión alimenticia de 2:1 hace que sea comparativamente económico criar avestruces hasta que alcancen el peso adecuado para llevarlos al matadero.
En cuanto al cuero, los antecedentes disponibles en la actualidad indican que alcanza un alto valor dentro de los productos que esta ave genera. Es mundialmente reconocido por su textura suave y flexible, su exclusiva apariencia y sus aceites naturales que lo hacen resistente al endurecimiento y al resecado. Es un cuero durable que se utiliza para fabricar artículos de alto precio, como botas, carteras y portafolios. Las plumas del avestruz se utilizan para limpieza industrial, particularmente en la industria automotriz y de informática. La grasa se derrite para ser empleada en la fabricación de cosméticos.
Las diversas fuentes de antecedentes técnicos y de mercado sobre el avestruz no siempre entregan información clara y transparente. En algunos aspectos difieren notoriamente, por lo cual es indispensable asesorarse en profundidad antes de tomar cualquier decisión de inversión en el rubro.
El avestruz fue domesticada para su aprovechamiento comercial a partir de cruces selectivos entre distintas subespecies de avestruces silvestres o salvajes. La variedad domesticada o comercial alcanza la madurez sexual casi un año antes que las razas puras, es de menor tamaño, tiene un carácter más manejable y posee un mayor índice de conversión productiva.
La industria del avestruz comenzó hace más de 100 años en Africa del Sur, como una empresa comercial viable. Actualmente la explotación de esta ave constituye una industria emergente en Francia, España, Canadá, Sudafrica, Israel, Estdos Unidos y Australia, entre otros países. Los principales países importadores de carne congelada y fresca son Suiza, Francia, Alemania, Japón y Holanda.
Anualmente se venden en los mercados mundiales de exportación 1.500 toneladas de carne de avestruz, 180.000 pieles y 160.000 kilos de plumas. Los productos derivados del avestruz muestran gran demanda y, aún cuando la industria sigue creciendo enormemente, la oferta no alcanza a cubrir la demanda.
Para que se cumplan las expectativas de un rubro rentable, la comercialización de la carne de avestruz, como todo producto nuevo, requiere de un esfuerzo intenso de difusión y promoción de sus ventajas en los medios de comunicación, permanente presencia en ferias, degustaciones etc., resaltando sus aspectos dietéticos (light o diet). Hay que tener presente que la carne de avestruz es desconocida para la gran mayoría de los potenciales consumidores y que su precio estimado es significativamente alto. Estas acciones de promoción se facilitan en la medida que existe asociatividad y una buena capacidad de gestión empresarial por parte de los productores.
Dadas las características productivas y las exigencias agroclimáticas de la explotación de este animal, nuestro país ofrece ventajas comparativas interesantes para desarrollar este nuevo rubro. No hay que olvidar que su hábitat natural corresponde a zonas áridas con precipitación pluvial promedio de 200 mm anuales y con temperaturas que fluctúan entre los 40º y -15º C entre el día y la noche. Esta es quizás la razón de la excelente adaptación de estas aves, y principalmente de los polluelos mayores de 6 meses, a diferentes climas en Europa, Asia y América.
Sin embargo, para iniciar su explotación comercial es necesario conocer el comportamiento biológico y productivo del avestruz en las diversas condiciones agroclimáticas del país, ya que una determinada zona puede presentar ventajas comparativas para un ciclo productivo en particular como, por ejemplo, la engorda, la finalización o el acabado. Por eso es indispensable conocer y definir su manejo, precisar las condiciones de alimentación, observar los parámetros productivos de consumo de alimento y agua de bebida, evolución del peso vivo y su ganancia diaria, mortalidad, enfermedades que la pueden afectar, rendimiento a la canal, etc.
Como antecedente general, es conveniente saber que el avestruz pertenece a un grupo de aves denominadas ratites, cuyas especies más importantes desde el punto de vista comercial son el avestruz originario de Africa, el emú de Australia y el ñandú de Sudamérica. Ratites es un término inglés que comprende un grupo de aves que se caracterizan por ser buenas corredoras, que han perdido su capacidad de volar (por lo que carecen de músculos pectorales y de quilla en el esternón) y que anidan en el suelo. En estas especies, la construcción del nido, la incubación y la cría de polluelos las realiza generalmente el macho.
Según Meza, las diversas especies de ratites no sólo son diferentes en su origen, sino también en su anatomía, fisiología y requerimientos alimenticios, en las características de los huevos y de la cáscara; varían también en el intercambio gaseoso y en la extensión de la incubación, lo que hace extremadamente difícil la explotación mixta de estas aves.
Sin embargo, Casademunt señala experiencias, hasta el momento exitosas, de criaderos en los cuales se está explotando en forma conjunta la cría de avestruces y de emús. Como estos últimos presentan un patrón reproductivo invernal, que corresponde a la época improductiva de los avestruces, la crianza conjunta permite una óptima rentabilidad sobre las inversiones de infraestructura de la explotación.
A continuación se indican las principales características del avestruz, el emú y el ñandú.
CARACTERISTICA |
AVESTRUZ |
EMU |
ÑANDU |
Origen |
Africa |
Australia |
Sudamerica |
Tamaño |
2,4 mt |
1,5 - 1,8 mt |
1,5 mt |
Peso |
160 - 180k |
55 - 70 k |
23 - 36 k |
Incubación (días) |
42 |
50 - 52 |
37 - 38 |
Temperatura (º C) |
15 - 20 |
20 - 25 |
25 - 30 |
Humedad (%) |
36 - 36,5 |
36 - 37 |
36 - 37 |
Longevidad (años) |
50 |
35 - 40 |
20 - 30 |
Huevos / año |
40 - 60 |
20 - 40 |
40 - 50 |
Peso del huevo (g) |
1300 - 1600 |
- |
400 - 800 |
Peso al nacer (g) |
500-900 |
- |
400-450 |
PRODUCTOS |
AVESTRUZ |
EMU |
ÑANDU |
Carne (k) |
45 |
- |
- |
Cuero (pie 2) |
14 |
- |
2-5 |
Plumas (g) |
100 |
- |
- |
En el caso del avestruz, se conocen diferentes subespecies o variedades comerciales, entre las cuales destacan las de cuello azul y negro. Esta última es más apreciada por cuanto ofrece mayor facilidad de manejo en cautiverio, adaptación al clima y alimentación. Algunas características del avestruz son su larga vida útil, la variedad y el elevado rendimiento de sus producciones y su excelente adaptación a diferentes ecosistemas.
Desde el punto de vista de su nutrición, las avestruces son calificadas por algunos especialistas como animales "semi-rumiantes", debido a la cantidad de fibra que son capaces de digerir gracias a la carga bacteriana del intestino y a la gran longitud de su aparato gastrointestinal, que les permite fermentar y aprovechar la fibra óptimamente. Esta particularidad hace posible alimentar las avestruces con fuentes fibrosas como heno, alfalfa verde u otra especie forrajera. En el caso del pollo doméstico, por ejemplo, la digestibilidad de la fibra es del orden del 6,5 %, mientras que en el avestruz puede llegar al 90 %. La fermentación de la fibra se produce principalmente en el ciego y en el colon, permitiendo la absorción de ácidos grasos volátiles y agua.
Estas ratites poseen un excelente mecanismo de concentración renal, siendo su economía del agua similar a la de los grandes mamíferos de la sabana y del desierto. Desde el punto de vista fisiológico, el gran desarrollo del sistema músculo-esquelético le permite mantener una enorme resistencia a la carrera (1,5 horas a una velocidad de 50 km/hora). Son animales que requieren realizar ejercicio diario, por ello normalmente los potreros o corrales deberán disponerse en forma rectangular.
La fisiología reproductiva en las hembras no se diferencia esencialmente de otras aves. La ovoposición tiene lugar en períodos de aproximadamente 48 a 72 horas. En los machos se producen notables cambios morfológicos en el aparato reproductor durante la espermatogénesis estacional, cuando el tamaño de los testículos aumenta del orden de 300 veces. En general las avestruces requieren de pocas atenciones sanitarias de tipo clínico; basta aplicar buenas medidas de bioseguridad.